lunes, 8 de agosto de 2016

Crítica: Mascotas (2016)

Estamos en verano y es la época de mayores estrenos de animación, para refrescarnos los días de intenso calor.

Os traemos en esta ocasión: Mascotas








De la factoria de otros estrenos veraniegos como fueron Gru Mi Villano favorito y Los Minions (2015) nos llega una idea original, la vida de nuestras mascotas cuando nosotros no estamos. Aunque ya os digo que la idea era buena pero la ejecución no es del todo satisfactoria.

La Sinopsis nos dice lo siguiente:

"En un edificio de apartamentos de Manhattan, la vida de Max como mascota favorita corre peligro cuando su dueña trae a casa a un otro perro llamado Duke, con quien Max pronto tiene sus diferencias. Pero ambas mascotas tienen que dejar atrás su rivalidad cuando se pierden y conocen a un adorable conejito blanco llamado Snowball esta reclutando a un ejército de animales domésticos que han sido abandonados, decididos a vengarse de todos los animales domésticos felices y de sus dueños."



El estudio Illumination quiere estar a la altura del gigante Pixar de la animación o al menos intentarlo con esta entrega.
Del mismo director de las películas que les han funcionado durante varios veranos consecutivos, Chris Renaud, parecía valor asegurado, pero he tenido la sensación de que la idea original que se nos planteaba se va difuminando en clichés.

¿Qué hacen nuestras mascotas cuando no estamos? Yo me supongo que dormir o morder lo que cuando estamos no les dejamos. Pues en esta ocasión, como rememorando unos juguetes que cambiaron la historia de la animación hace ya unos años, nuestros protagonistas, Max un acomodado terrier bicolor, Duke su nuevo compañero de piso, van a recorrer Nueva York entero acompañados de secundarios con mas o menos gancho.
Desde luego que sus peripecias por la ciudad estén acompañados por un lindo conejito con un oscuro corazón, un cerdo tatuado, un perro salchicha escalador, una gatita perezosa con problemas de sobrepeso y una caniche enganchada a las telenovelas ayudan a mantener una trama bastante de serie B.


La historia inicia bien, con varios gags con gancho para presentar tanto al protagonista como a los secundarios "amaestrados" y justo lo que realizan cuando sus dueños no están. Pero poco a poco va perdiendo fuelle conforme Max y Duke abandonan el piso y empiezan su andadura por una Nueva York de colores pastel.

Como ya viene siendo normal en estas películas una vez más nos cuidan a los adultos que "acompañamos a los niños a ver la peli de dibujos", yo voy a verlas sin complejos en realidad, pero se que muchos no lo harán. Existen multitud de chistes que los pequeños de la casa no entenderán así como reseñas a Hitchcock o el romper los esquemas como un caniche rococó que le guste el heavy metal.

Ya os he comentado que no es una historia nueva, pero no por ello os desaconsejo que la veáis, puesto que el timming de los gags, de lo más conseguidos algunos, hacen que pases dos horas y algo bastante entretenidas.

Desde luego tiene algo, puesto que ha desbancado a Del Revés (2015) con el mejor estreno de la historia en USA con 103 millones de dólares con recaudación. 



¿Qué ha propiciado esto? Creo que el diseño de los personajes, su forma de fijar el tópico y después desarticularlo así como unos gags que despiertan carcajadas más o menos fáciles hace que todo funcione como si fuera nuevo aunque nos estén presentando una historia algo trillada.


Quiero reseñar una fresca y chispeante música de Alexandre Desplat muy necesaria y que enlaza perfectamente en la película y nos demuestra, cosa que hacen los grandes pero en este tipo de historias también es importante, la necesidad de una banda sonora con gancho.


Eso si , quisiera aquellos que la hayáis visto ya me digáis si vosotros también habéis escuchado al igual que yo una palabrota dicha por uno de los protagonistas, por favor si habéis sido conscientes de ello decidmelo.

Comentar un par se SPOILERS, (tu si tú el quisquilloso deja de leer hasta la nota):
El hecho de que el conejo simplemente quisiera alguien que le quiera, era algo más que previsible pero esta claro que despierta la sonrisa cuando, en varios momentos se ve esa bipolaridad de conejiito con la cola como un pompón pero esta dispuesto a acabar con la raza humana.
Eso de que los personajes pongan ojos grandes y vidriosos pensaba que era algo que había patentado el Gato con Botas de Sherk como marca personal pero aquí se usa hasta la saciedad.

Lo que me parece algo sospechoso es el plano final, con todos los dueños volviendo a su hogar y abrazando a sus mascotas y siendo felices al ver los festejos de estos al llegar pero...¿no tienen hijos? ¿sólo viven para trabajar y llegar a casa y ponerles la cena?



La claqueta cinegénica le da:     6,5 / 10

Comentaros que al igual que ocurre con lo que esta claro es su modelo a seguir, aquellos que nos sentamos unos minutos antes en la sala disfrutaremos de un simpático corto con los "personajes de la casa" con los Minions.


Me despido, como siempre, dejando el tráiler, y deseando grandes y mágicos momentos de cine a todos nuestros lectores.



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