Resumen de las vivencias de Cannes 2016

Hola a todos.

Os escribo aún con el síndrome "post depresivo" de lo que es cumplir un sueño por tercer año consecutivo y es que, asistir al festival por excelencia, es un lujo que tengo el gran placer de vivir.

Estos días os he dejado en buenas manos, puesto que Rocío, quedándose en España, os ha ido relatando todo los que he vivido en el 69 Festival de Cine de Cannes.

Y es que los días en Cannes deberían durar más de 24 horas para que te de tiempo a todo lo que quieres hacer, ver y vivir.

En el apartado cinéfilo comentaros que he tenido el privilegio de visionar 5 largometrajes, alguno de ellos los más deseados por todos.

The Nice Guys (Dos buenos tipos)

Fuera de competición se presentó esta comedia de la que todo el mundo hablaba y de la que incluso se llegaba a comentar en el Palais que venía dispuesta a ser de lo más reseñable del año en cuanto a comedia detectivesca y de gags se trata.
Protagonizada por Ryan Gosling y Russell Crowe, una pareja bien avenida en cuanto a aflojar seriedad y demostrar que Shane Black ha sabido dirigirles en lo que parece una película trivial, pero que esconde buenos diálogos lo que ayuda a la risa, algo que parece que para dicho festival sea algo a no tener en cuenta, pero que personalmente creo que es un ejercicio sano y necesario.
He de decir que aun tiemblo al pensar que estaba sentada a unos metros de nada de estos dos grandes actores que demostraron que no solo se llevan bien en la gran pantalla, además iban acompañados por Matt Bomer, todo un galán que en este caso se mete en la piel de uno de los villanos.

Loving 

De Loving quiero recalcar su mensaje, la nueva película de Jeff Nichols nos relata una historia real, la de el matrimonio Loving, un matrimonio interracial (Ruth Negga y Joel Egerton) en los años 50 y como se ven obligados a abandonar Virginia puesto que allí no era posible dicho matrimonio. Posee unos paisajes que realmente te trasladan al lugar y quisiera señalar que demuestra, sin llegar a ser pastelosa, que el amor puede romper muchas barreras.Desde luego es toda una película americana, de las de demostrar que en dicha tierra todo puede lograrse y con finales felices.
Vaticino que escucharemos hablar de ella en la carrera de los Oscar, sobre todo por un Joel Egerton digno de ser al menos mencionado en las quinielas.
Uno de los aspectos que más me llamó la atención de la historia es el papel de Negga como Mildren Loving, puesto que es ella la que no se queda de brazos cruzados y quiere que el mundo sepa la injusticia que vive.

La Fille Incounne

La gran y esperada propuesta de los hermanos Dardene, fue una de las películas que más frio dejaron al Gran Teatro Lumierè de las que tuve la suerte de visionar, y es que dichos hermanos belgas son de los más queridos en el festival y tengo la sensación de que muchos de los asistentes tenían las expectativas demasiado altas.

Una vez más se trata de cine social, en este caso una médico social que tiene una consulta y que una noche, estando cansada decide no abrir la puerta a una llamada a deshora. A la mañana siguiente se entera que se trataba de una chica desconocida que ha sido hallada muerta.

Es un intento de un ser humano de intentar sobrellevar el remordimiento y la culpa, de como dicha doctora, interpretada correctamente por Adèle Haenel, intenta desesperadamente conocer la identidad de la chica. Las escenas de desasosiego y desesperación, quedan bien reflejadas en la cara de la protagonista.

Personalmente se me hizo larga, también puede que fuera que mi día había sido más que largo, y es que en el festival lo de dormir y descansar es algo secundario.

Simplemente reseñar que los aplausos al finalizar eran tímidos y que es de las películas que hay que reposar antes de dar un veredicto sobre las mismas. A día de hoy me gusta más que en el instante que salí de la sala.

Juste la Fin du Monde (Sólo el fin del Mundo)

Ya os comenté en mi entrada sobre lo que Esperaba disfrutar en este festival que estaba deseosa de poder disfrutar de la propuesta de Xavier Dolan, y es que a sus 27 primaveras de nada esta llamado a ser, o eso parece, un grande de la industria.

Mucho se ha hablado de él en el Palais durante todo el festival y de hecho, puede que me equivoque, pero era la película que todos querían ver.

Desde luego no es la mejor película de Dolan, pero no olvidemos la trayectoria del joven y simpático canadiense, con Juste la Fin du Monde es la quinta vez que lo podemos disfrutar en la ciudad del mar azul.

En este caso nos cuenta una reunión familiar con motivo del regreso, tras 12 años, de uno de los hijos, cuyo propósito es decirle a la familia que se muere.

Las interpretaciones de Gaspard Ulliel, Vincent Cassel, Lea Seydoux, Nathalie Baye y Marion Cotillard son impresionantes, demuestran porque son ahora mismo el referente del cine francés.

Ya os lo comentó Rocío, pero yo os lo recalco y es que conseguí que tanto Xavier Dolan como la siempre seria y ausente, Marion Cotillard me firmasen sendos autógrafos. Decir que el de Dolan es para mi gran compañera y amiga bloggera, puesto que es una fanática del cine del canadiense y es un pequeño gesto para demostrar que quisiera compartir todos esos momentos con ella.

The Neon Demon

Desde luego ha sido la película más extraña que he visto estos dias.

He de decir que iba con ganas puesto que soy una apasionada de Drive (2010) y ver en Cannes lo nuevo de Nicolas Winding Refn era todo un aliciente para mi. Si ya me pareció extraña y excesiva Only God Forgives (2013), esta nueva película va incluso más allá. Vaticino que habrá grandes apasionados de la misma pero para mi es muy rara, eso sí, una fotografía más que a tener en cuenta y una banda sonora de las que se te queda en la mente. La interpretación de Ellen Fanning como una aspirante a modelo que en realidad es más bien una muñeca de porcelana rota es notable aunque quisiera reseñar una brillante interpretación de Jena Malone, como la descubridora del potencial de la protagonista que termina completamente obsesionada con la misma.

Y Cannes no es solo disfrutar viendo películas...

Sé que sabéis que para mi Cannes no es solo el visionado de las películas, sino la posibilidad de tener cerca a ídolos y gente que trabaja en la fábrica de sueños que es el cine, todo lo que lo rodea, esa aureola de expectacion.

Ya os lo comentó Rocío pero soy de las afortunadas en este mundo cinefilo que posee un autógrafo de Steven Spielberg y he de decir de él que transmite calidez y cercanía. 

Comentaros que una vez más los "grandes" de la industria lo son por algo y es que las grandes estrellas son, a fin de cuentas las que más paciencia tienen con los fans a la hora de firmar autógrafos.
Supongo que son conscientes de que son los espectadores los que llenan las salas y claro está, gracias a ellos tienen la fama que tienen.

No solo he estado cerca de Spielberg, sino que este año ha sido muy prolífico en cuanto a suplir esa necesidad de fan. Tuve el placer de compartir unos segundos con Jeff Nichols y de empezar a tener en cuenta a Joel Egerton como un más que posible Gen Recesivo.

Por segunda vez en mi vida he visto en directo a Viggo Moltersen, la edad no perdona pero esa mirada siempre te hace recordar la Tierra Media.

Lo mágico que tiene para mi Cannes es que sales un día a buscar el postre, y te encuentras con los coches que esperan a Sean Penn, Javier Bardem y la semidiosa imperator Charlize Theron.

O salir de un pase y encontrarte a Donald Shuttherland dispuesto a firmar autografos y hacerse fotos pese a ser unas horas intempestivas, o a un magnético Mads Mikkelsen.

En definitiva, que una vez más el Festival de Cine de Cannes es para mi un sueño del que cuesta despertar. Que mis diez días disfrutando de la luz y la costa azul hacen que deba pellizcarme una y otra vez cuando estoy allí.

Me despido de vosotros deseandoos de nuevo grandes momentos de cine, dando las gracias a todos y cada uno de los que han hecho posible que viva de nuevo el sueño, esperando de corazón que viváis el cine como nostras y dejando aquí constancia mi intención de cumplir el sueño de que el 70 Festival de Cannes tenga a Rocío a mi lado y poder vivir toda la magia del séptimo arte juntas.